Tu esposa sigue viva”, dijo la joven sin hogar—y el magnate inició una investigación impactante.
El sol se ocultaba tras las lápidas de mármol mientras Ricardo Mendoza permanecía inmóvil, contemplando la tumba de su esposa, Lucía. El magnate dueño de Mendoza Corporación había asistido a innumerables funerales de empleados, socios e incluso rivales, pero ninguno se comparaba al día en que enterró al amor de su vida dos años atrás. … Read more